miércoles, 24 de agosto de 2016

Entrevista de semblanza (o como los hipster le llaman: profile)

Comparto con ustedes la inusual entrevista que me hizo la conocida reportera Bareska  López:

Jonatan Melquiades Reyes, egresado de la Universidad Nacional de Piura, de la escuela de comunicaciones, me recibe con su camisa a cuadros bajo la que se oculta su faceta friki (una camiseta de Superman, su héroe preferido)― y con afabilidad nos relata su experiencia como escritor y sus inspiraciones y curiosidades de su obra “Muñeca de trapo”, así como su anterior faceta de estudiante y su continua personalidad creativa y de ávido lector. Además de confesar su modo de captar la atención de sus lectores.


―¿Por qué y cómo decidiste ser escritor?
Bueno no lo sé, no es una decisión, es algo que he tenido toda mi vida porque viene de familia; mi padre es artista, escribe, hace canciones, ha hecho teatro. Y creo que por ese lado empezó todo, ya desde pequeño participé y gané algunos concursos de poesía.

―¿Cuándo salió tu primer publicación?
Mi primer libro salió en quinto de secundaria, en el año… uf hace mil años, no recuerdo exactamente cuál fue (risas), creo que fue en el 99. Yo estaba en quinto año de secundaria y fue un poemario del cual me avergüenzo mucho porque para mí era un trabajo “malo”, aún así se decidió hacer el libro.

―¿Te considerabas un novato todavía en el tema de la escritura?
En esa época sí, ahora considero que he mejorado bastante y ya tengo un estilo definido.

―Tu primer libro fue de poesía pero el segundo son relatos cortos. ¿Por qué ese cambio de la escritura en verso, por la escritura en prosa?
El cambio se debe a que siento que los cuentos me salen mucho mejor que las poesías. Como he mencionado, mi primer poemario me hace sentir un poco avergonzado  porque pienso que son poesías muy adolescentes, muy concentradas en el amor idealizado, que en su tiempo las escribí por ciertas situaciones pero que una vez crecido las volví a leer y me dije a mí mismo “¡Dios, cómo pude escribir esto!” (risas). Entonces últimamente no escribo poesías, aunque sí participo en un blog llamado “Blog de a cuatro” donde suelo publicar escritos con mucho de ese estilo poético. Sin embargo creo que me queda mejor la prosa.

―¿Cuál fue tu experiencia en la publicación de tu primer libro? ¿Contaste con el apoyo de tu familia o fue un trabajo constante y duro?
No, al contrario. El primer libro llamado “Una vida, un verso”, fue más bien una motivación de mis padres quienes lo querían sacar como una especie de publicidad para “Emaus”, empresa en la que trabajo actualmente. Yo no estaba muy de acuerdo porque sentía que el material que había elaborado no tenía condición publicable. Pero se sacó y así fue. De hecho no estuve muy involucrado en el proceso de impresión.

―¿Con “Muñeca de trapo” tuviste la misma experiencia?
Con esa última obra sí estuve bastante involucrado en cada proceso. Es más una vez publicado el libro, mis amigos de Caramanduca me ofrecieron un lugar en la editorial que acepté y ahora también trabajo en edición, correcciones de otras obras. Yo, definiría a “Muñeca de trapo” como mi primer libro oficial.

―¿Entre los autores que lees, hay alguno en especial que te haya influenciado?
Sí, yo creo que tengo tres autores que me influenciaron mucho, a los que estuve leyendo bastante en una época donde también escribía mucho. Son J. R. R. Tolkien, Edgar Alan Poe y Julio Verne, a los tres los he leído y releído muchísimo.

―¿Cuál es tu obra favorita de Verne? ¿Las has leído todas?
Mi obra favorita de Verne es “La Jangada”. Hubo una época en la que perdía clases por quedarme leyendo horas a Julio Verne. No sé si he leído todas pero la mayoría de hecho sí. De igual manera sucedió con Tolkien y “El señor de los anillos”, obra que he leído dos o tres veces.

―¿Y la influencia de esas lecturas de fantasía, ficción y surrealismo, ha sido plasmada en tu libro “Muñeca de Trapo”?
Sí, hay muchos cuentos que yo los considero de ese estilo.

―En esa obra que recopila varios relatos cortos, está el cuento “Piedra, papel o tijera” ¿Tiene alguna referencia a algo?
Obviamente, la película “El joven manos de tijera” es una de mis películas favoritas ―por no decir la preferida ―. Mi influencia para escribir no viene tanto de autores de libros y mucho menos de los clásicos, sino más bien de otras artes como lo son la música y el cine. Como este primer cuento de “Muñeca de trapo” que hace tributo a la película ya mencionada.

―¿Y ese rechazo hacia los clásicos a qué se debe?
Bueno en mi casa todo el mundo lee autores y obras clásicas, pero que sean mis preferidos o que de mi nazca leerlos, no. Creo que tiene que ver con que en el colegio me impusieron leerlos como parte de la evaluación, entonces no me agradaron porque lo sentí como una imposición y no como algo mío.

―¿Cuáles han sido tus influencias musicales?
Una de éstas se muestra en el cuento "Mr. Jonks" donde doy paso a una canción de Queen, "Bohemian Rapsody". Quien no conoce o entiende esta canción, no le hallará mucho sentido al cuento. Otra influencia está en el relato "Interestelar".

―"Insomnio" es uno de los cuentos que más impacta y causa temor cuando se lee. ¿También te ha impresionado o atemorizado escribir alguna de esas historias?
De hecho sí, está el cuento “Reflejos” que a pesar de que yo lo había escrito, cuando al fin lo leí en la noche, tuve un fuerte temor  y recuerdo que volteaba la cabeza observando toda la habitación para asegurarme de que no había nada.

—La mayoría de tus relatos empieza con la narración de acciones y personajes muy normales, pero llega un momento sorpresivo ―casi al final― en donde se muestra la verdadera personalidad oscura o escondida de los personajes.
Sí, es lo que intento con mis historias. Tenía un profesor que siempre decía que para impresionar a los lectores había que “voltear” la historia, darle un rotundo cambio, “noquear” al lector. Y eso es lo que trato de hacer en ellas.
Hay una cosa que yo aclaro a los lectores cada vez que puedo, y es que si bien los relatos que escribo recogen temas oscuros, de terror, muerte, etc; yo no soy así. No voy planeando muertes o ataques en mi vida, no soy una persona depresiva. He tenido mis malos momentos, como cualquier persona, y he usado la escritura como instrumento de catarsis.

―Estuviste residiendo un tiempo en España ¿Qué obtuviste de ello?
En España, de hecho, surge el libro; ahí es donde escribí el primer cuento “Muñeca de trapo”, que salió de tirón. Fue como una catarsis en un momento complicado de mi vida, cuando estaba solo, lejos de mi familia y de mi hijo. Tenía un bajón muy fuerte. Entonces si uno lo lee observa que el cuento es bastante oscuro, donde se plasma esa parte de mi vida. Lo cual no está bien, sé que no es sano escribir cuando estás mal influenciado.

―¿Está en tus planes escribir una novela?
Me gustaría escribir una novela pero no logro mantener una historia larga. Es mas en la universidad empecé a escribir una novela en un cuaderno, tenía la historia de un héroe de un país que tenía una princesa. Entonces, cuando ésta se mata, él se haya en la decisión conflictiva de seguir siendo un héroe o convertirse en un ser malvado para ir al infierno y encontrarla. Hasta que el cuaderno se perdió en la universidad y nunca lo encontré. Entonces me desanimé y pensé que mejor me quedaba con los relatos cortos que es lo que mejor se me da.

―¿Tienes nuevos proyectos?
En cuanto a escritura sí, tengo varias historias que pienso sacar en una nueva obra. Incluso pienso sacar una re-edición de “Muñeca de Trapo”. Por otro lado con los muchachos de Caramanduca estamos trabajando en el proyecto audiovisual llamado “Comadrejas” en Youtube. Es un hobbie que disfrutamos.

―Por otra parte también te gustan los cómics.
Así es, me gustan mucho estos. He leído varios, hay una infinidad de títulos para elegir. Me gustan los que tratan historias de súper héroes, mis favoritos son los de DC comics, aunque también he leído los de Marvel. Solía buscar los cómics menos comerciales por ejemplo Maus, un cómic muy bueno ambientado en la segunda guerra mundial.

―¿Has pensado en colaborar en algún cómic?
Con Caramanduca hemos pensado en hacer nuestros propios cómics. No comprar los derechos de otros sino elaborarnos nosotros. Pero es una cosa que demanda muchísimo tiempo y trabajo y por ahora no nos da mucho tiempos para ello aunque nos gustaría.

―¿Cómo te definirías en tres palabras?
Desordenado, responsable e imaginativo.

Bareska López