Dame la mano
pequeño superhéroe. Deja que las burbujas jugueteen con tus pies. Tenemos aún
miles de cangrejos por atrapar. Cuelga la capa, ayúdame a caminar, paso a paso
en la orilla que yo te enseñaré a nadar.
Dame la mano
pequeño guerrero espacial. Enfunda la espada láser, estaciona la nave nodriza.
Liberemos planetas el lunes, que hoy tenemos castillos de arena por edificar.
Un castillo con un pozo, un muro contra el mar, un calabazo para los caracoles
y un túnel para escapar.
Dame la mano
pequeño príncipe encantado. Hoy no cazaremos dragones. Hoy cuidaremos de la
princesa que te puso el nombre. Dile a los unicornios que hoy no podremos
cabalgar. El bosque encantado tendrá que esperarnos. Hoy nos aventuramos en el
mar.
Dame la mano
pequeño ladrón de mi corazón. Toma mi vida en tus manos y déjame tomar la tuya
en las mías. Dejemos que por hoy el mundo
siga tropezando al rodar. Y descuida, que aquí estoy a tu lado para ayudarte a
cruzar. Dejemos que caiga la noche, que los peces se cansen de nadar, dejemos
que el sol nos queme y las gaviotas se rían de nuestro peinado.
Olvida que tienes
un jarabe por tomar, un gato cojo para fastidiar, olvida que mamá trabaja y que
mi oficina me espera ya. Olvídalo todo y dame la mano, que hoy viviremos en el
mar.