jueves, 12 de febrero de 2015

Tan cliché como el sol de Piura

Vamos a empezar. Hoy por la mañana les propuse a Jonatan, Gabriel y Angel (mencionados en orden por su respuesta y/o entusiasmo a la idea) iniciar un blog. Les dije que sería un buen proyecto para mantenernos al corriente o, en su defecto, que sería un buen ejercicio literario. Lo que no les dije es que, acostumbrado a llevar blogs desde hace diez años, éstos resultan servir como cartas a uno mismo, como una suerte de comunicación atemporal con un yo del pasado.
Algo así como...

"Frequency" es una película estadounidense de 2000. En ella
un joven habla con su padre en el pasado por medio de una
radio.

En fin, no sé bien por qué se me vino la idea de empezar este blog. Quizá sea porque hace unos días estuve revisando otros proyectos de diario abandonados o porque últimamente terminé de leer "Papaito piernas largas"... pero lo que sí sé es que si vamos a empezar este proyecto tenemos que hacerlo interesante. Por eso, y como soy yo el encargado del primer post, solicito no hablar de clichés. Y, para evitar que esto se filtre acapararé el primer tema piurano de las Piuras. El calor.

Hace unos días el Senamhi dijo que en Piura sobrepasamos los 37C, con una sensación térmica de 42C. Dijeron además que no llegábamos a esta temperatura desde hace 30 años y que sugerían no salir de casa entre las 11am y las 3pm para evitar la radiación.

Bueno, desobediente yo, salí entre las 11 y las 3. Tomé unas cuantas fotos.

Así se ve una ciudad a la que se le apoda "del eterno calor"

Esto es prolongación Grau, por Enace, casi a las afueras.

Vale decir que ayer no pude dormir por el calor. Abrí todas las ventanas. Me di una ducha fría. Me desnudé. Me eché sobre la cama. Puse el ventilador frente a mí a máxima potencia. El aire que salía era apenas comparable con el que despide el radiador de un caminón, una secadora de pelo o el termoventilador que uso en invierno cuando hace mucho frío.

Sí, hace un huevo de calor, pero también lo hará el siguiente verano. Y si sobrevivimos a éste, espero que en próximas ediciones de este solsticio no exageremos y recordemos (y citemos) la presente información. Duerman tranquilos. Imagínenme desnudo y sudando como un marrano. Buenas noches.

2 comentarios:

Angel dijo...

Buena, Aguirre!

Jonatan Melquiades dijo...

Había olvidado esa peli... la veré otra vez... algún día... lo más probable es que olvide que quiero verla otra vez